La historia de Ucrania y el Donbás, una montaña rusa de poder y una ensaladilla étnica ucraniana.

Por @jordicarreno

No hay historia que no se escriba con sangre, ocupaciones territoriales, colonizaciones étnicas, mestizajes y movimiento de fronteras, Estados, etc. Es la historia de la humanidad.

Ucrania es un Estado unitario y soberano, reconocido internacionalmente incluso por Rusia y que está formado por 24 oblast desde que se independizó de la antigua URSS en 1990. Una república democrática regida por un sistema semi presidencialista, con separación de los poderes: ejecutivo, legislativo y judicial y cuyo idioma oficial es el ucraniano, aunque el ruso es oficiosamente aceptado en muchas regiones pero principalmente en el Donbás donde el ruso se habla mayoritariamente.

El Donbás es la región situada al este de Ucrania y que está atravesada por el río Donest. Se divide en tres oblast o entidades administrativas subnacionales histórica, cultural y económicamente,; dos ubicadas en Ucrania y que están formadas por las provincias de Donetsk al sur y Lughansk al norte y, un oblast ruso ubicado parte en Rusia y parte en Ucrania, el oblast de Dnipropetrovsk. Con estas premisas se hace complicado no pensar en un posibles conflictos territoriales. Sigamos…

Mapa político de Ucrania

Ucrania histórica y documentalmente se la reconoce como nación a partir de la romanización en el año 882 a.C. con la unificación de las tribus eslavas denominada el Rus de Kiev. Pero, su composición territorial anterior, desde la prehistoria hasta la Edad de Hierro y posteriormente al Rus es un conglomerado tribal formado por las tribus de sármatas, roxolanos, meotes, escitas, jázaros, cumanos, cosacos, nogayos, mongoles, otomanos, tártaros hasta los siglos XVI y XVIII que con la formación de Ucrania de Slobodá (Ucrania libre) en de 1735queda conformada por un crisol de comunidades eslavas formadas por colonos rusos, serbios, eslavos búlgaros, eslavos polacos, alemanes, griegos y la comunidad judía.

La influencia rusa llega con la caída del Kanato de Crimea después de la guerra ruso-turca sucedida entre 1735 y 1739 que dejó a Crimea bajo el poder de la Rusia zarista e incorporándose a esta en 1774.

Y ahora, con todo esta mezcolanza hay que hacer la ensaladilla ucraniana de nacionalidades territoriales… Pues también viene la montaña rusa `de ocupaciones y desocupaciones tras la caída del Imperio Zarista de la región del Donetsk pero no la pérdida de influencia rusa; que pasó por un período inestable donde se sucedieron múltiples unidades administrativas y de bandos opuestos desde la República Soviética de Donetsk; el Ejército Blanco y la República del Don; las comunas anarquistas;la ocupación del ejército alemán y el Hetmanato para llegar finamente a la URSS como la República Socialista Soviética de Ucrania establecida en el año 1919 como la gubérniya de Donetsk transfiriendo su capital el 12 de octubre de 1920 Bájmut y que en 1921 controlaba toda la región


Wikipedia
Colaboracionismo ucraniano con la Alemania nazi

El 2 de julio de 1932 Donetsk se dividió en 5 ókrug, de los cuales Artémivski, Mariúpol y Stálino conforman el actual óblast de Donest, es el 3 de junio de 1938 cuando se integra el óblast de Stálino (Donetsk) después de la desocupación el ejército NAZI alemán en 1941. Los otros dos en la óblast de Voroshilovgrad (Lugansk) quedando la región partida en dos, las actuales Donetsk y Lugansk,. Ya tenemos la nueva formación territorial del Donbás pero no es hasta finales del año 1961 cuando «Stálino» pasa a denominarse oficialmente Donetsk.

En 1991, días antes de la caída de la URSS se celebró un referéndum de independencia de Ucrania. Este fue apoyado mayoritariamente en la óblast de Donetsk con un 76,85 % de los votos, y así es como Ucrania volvía a la antigua configuración territorial eslava, pero ya bajo el gobierno prorruso del presidente Víktor Yanukóvich que, para llegar a la presidencia impugnó el resultado electoral que daba como vencedora a la que fuera Primer Ministra dos veces Yulia Timoshenko.

Independencia de Rusia 1991 . Fotografía Archivo COPE

Es cuando Ucrania vuelve al conflicto a causa de la presión ejercida por los estudiantes que intentan zafarse de la influencia rusa y que se rebelan contra el gobierno prorruso de Yanukóvicch en la llamada Revolución de la Dignidad o Euromaidán que terminó con la destitución de este y la constitución de un gobierno provisional que volvería a conviocar elecciones. Mientras, el expresidente se auto exiliaba a Rusia, es ahí cuando la situación empieza a complicarse y empeorar… De hecho es el inicio del actual conflicto del Donbás.

Previo a este período y desde el año 2012 hasta el 2014, se suceden actos continuados a favor y en contra de Rusia, sobre todo en la región del Donbás mientras en la capital se sucedían contínuas manifestaciones y actos y donde el actual presidente, Volodomir Zelensky empresario y cómico entonces, se manifestaba contra el propio gobierno de Ucrania en defensa de los actores rusos al aprobarse desde el Ministerio de Cultura la ley que prohibía trabajar a estos en Ucrania, incluso, Zelenscky con su productora Kvartal 95 instaló una delegación en Rusia donde producía programas de televisión y comedias.

Manifestaciones estudiantiles Euromaidán Foto: Mundo Obrero

Todo ello sucede mientras los estudiantes siguen su rebelión e inician un proceso de constantes denuncias a la población sobre la corrupción política y rusificación de Ucrania. La crisis que afecta al país suma los peores datos económicos desde la independencia de Rusia en renta, aumento de la pobreza, paro y el enriquecimiento ilícito de las clases dirigentes y oligárquicas; esto último sobre todo, hace de espoleta cuando dos días antes de la firma del Acuerdo de Asociación y de Libre Comercio con la UE el gobierno de Yanukóvicch bajo supuestas presiones del Kremlin, anula la firma y el propio acuerdo lo que llevó a los universitarios a salir a la calle empujando al resto de la población y donde se aprovechan entonces los grupos anti rusos de ultra derecha para actuar en la región del Donbás y en Kiev capital dando apoyo a los manifestantes del Euromaidán. La brutal represión gubernamental costaba la vida a 60 manifestantes en la plaza central de Kiev. El conflicto estaba servido en bandeja

El mismo 24 de febrero Yanukóvicch huye y el gobierno provisional en funciones emite una orden de búsqueda y captura contra el expresidente Yanukóvich desde Ministerio del Interior acusándolo de «asesinatos en masa» durante la rebelión en Kiev, acto por el cual, al día siguiente la Rada Suprema presenta una demanda contra este por “Crímenes de Lesa humanidad ante la Corte Penal Internacional de La Haya”.

Entre los días 26 y 27 de febrero las tensiones separatistas en el Donbás y Crimea propician la intervención rusa y es cuando Putin ordena la toma de Crimea de población mayoritariamente favorable a la rusificación incluso de los propios ucranianos pues su economía gracias a la base de Sebastopol era muy superior a la del resto del país, la zona se convierte en área de guerra con los enfrentamientos previos entre nacionalistas rusófilos y ucranianos europeístas.

La Guerra del Donbás: comienza con los disturbios en Donetsk y Luhansk donde se organizaron milicias locales que se apoderaron de los edificios administrativos y gubernamentales, también de las comisarías de policía y de los cuerpos especiales en la mayoría de las ciudades importantes en sendas regiones.

Petró Poroshenko que había ganado las elecciones presidenciales el 07 de julio de 2014 y que se mantuvo en el poder hasta la victoria de Zelenscky el 20 de mayo de 2019 ejerció el poder como presidente en el momento de mayor conflicto y convulsión de Ucrania; de hecho, la misma noche de su victoria electoral ya anunció que su primer viaje presidencial sería a la región de Donbás donde los rebeldes prorrusos armados habían declarado las autonomías de la República Popular de Donetsk y la de la República Popular de Luhansk, tomando el control de una gran parte de la región. Poroshenko se comprometió entonces a continuar con las operaciones militares de las fuerzas gubernamentales para poner fin a la insurgencia armada tratando de terroristas a los rebeldes rusos comparándolos con los piratas somalíes.

Petró Poroshemko expresidente de Ucrania actualmente el libertad provisional Imagen archivo de RTVE

Poroshenko solicitó entonces la presencia de intermediarios internacionales en las negociaciones con Rusia, la cual se negó diciendo que no necesitaba intermediarios en sus relaciones bilaterales con Ucrania y menos en los territorios independientes anexionados como Crimea. Como presidente electo entonces Poroshenko prometió conseguir el regreso de Crimea a la soberanía de Ucrania. Con todo esto…

Cruz roja ya definía para entonces la zona del Donbás como “Región en Guerra Civil” tras el derribo del vuelo 17 de Malaysia Air Lines con destino a Ámsterdam que operaba con código compartido con la compañía holandesa KLM. Vuelo que cayó por el impacto de un misil tierra-aire en los duros enfrentamientos del ejército ruso y los nacionalistas prorrusos contra el ejército ucraniano y las milicias nacionalistas sin que la autoría quedase aclarada pues ambas partes se acusaron mutuamente de ser las autoras.

En estos enfrentamientos es cuando el gobierno de Poroshenko es apoyado además de por el ejército oficial por las milicias y grupos paramilitares nacionalistas ucranianos de corte neonazi salidos de formaciones ultraconservadoras afines al Batallón Azov, una fuerza paramilitar integrada mayormente por militantes de los partidos de extrema derecha Pravy Sector -Sector Derecho- y Svoboda que ya fueron protagonistas de participar en el derrocamiento del gobierno de Yanukovich y que estaban siendo financiados paradójicamente por el millonario ultraconservador de origen judío Ihor Kolomoisky,, que en su anticomunismo apoya también al gobierno de Zelensky, al cual tildaron de prorruso al inicio de su mandato y que él mismo ha intentado desmarcarse de estos, pero a causa de la invasión rusa ha terminado aceptando su ayuda y participación. Del mismo modo, Putin recibió bien a Zelenscky con los brazos abiertos pensando que tenía un aliado más al ser de lengua rusófila, tener negocios en Rusia y al haber apoyado a los artistas de este país ante su gobierno antes de saber cuáles eran los verdaderos planes europeístas y occidentalizados del nuevo presidente ucraniano.

Miembros ultraderechistas del Batallón Azov de ideología neonazi

Esta participación es la que usa Putin usa como justificación responsable de los actos violentos acontecidos en 2014 en el Donbás contra la población rusa y ucraniana prorrusa en el conflicto provocado por el el Euromaidán que llevó a los enfrentamientos entre ambos bandos y a la guerra civil con un éxodo de más de 700 mil personas y unos 14.000 muertos.

Actualmente también le ha servido al dirigente ruso de excusa argumentando en defensa de los rusos y prorrusos de la zona que debía desnazificar esta para ocupando así el territorio ucraniano e invadiendo posteriormente el país provocando la actual «guerra de Ucrania» bajo la acusación de Nazis y drogadictos de modo general a los ucranianos y, que es el actual motivo del conflicto bélico que pone a Europa y al Mundo en un verdadero entresijo diplomático de sanciones y en riesgo real de extender el mismo dadas las imprevisibles consecuencias y actuaciones que, a fecha de hoy, puede haber provocado la mayor crisis humanitaria desde el siglo pasado en un éxodo de refugiados superior a los 2.5 millones de expatriados sin que haya un número todavía oficial de víctimas por ambos lados.

Imagen del Presidente Vladimir Putin archivo de El Diario

La realidad del Donbás es que en estas dos provincias, la alta e histórica presencia de rusos que, sin ser superior a la ucraniana sí mantiene una fuerte presencia y arraigo lingüístico y cultural. Un ejemplo es que en Mairupol de las 70 escuelas, 69 son lingüísticamente rusas y sólo 1 usa la lengua y el sistema educativo ucraniano oficialmente. Esto hace de la zona un área caliente de conflicto lingüístico, intercultural y étnico en sí mismo.

Sus grupos étnicos sin censo fiable se dividían según datos oficiales antes del conflicto en unos 2.744.100 ucranianos (el 56,9 %) y 1.88.400 rusos (38,2 %) de la población. Eso sí: el ruso es el idioma dominante en estos óblast con casi un 75% del habla frente al 25 % de parlantes en ucraniano.

Las diferencias culturales y lingüísticas son realmente las raíces de los enfrentamientos políticos entre separatistas rusos y ucranianos, pues los rebeldes se sienten más cerca de Moscú que de Kiev, tanto que incluso las dos iglesias ortodoxas, la rusa y la ucraniana están enfrentadas.

CONCLUSIÓN: Si a toda esta montaña rusa de idas y venidas político-étnicas, más la ensaladilla multicultural eslava, balcánica, helénica, otomana, etc., etc…, de religiosidad separada, de ideologías enfrentadas en dos modelos, uno próximo al capitalismo occidental y otro al sistema comunista -ahora por interés del megalómano sistema presidencialista de Putin, una ideología de corte conservador supranacionalista rusa de estatismo dependiente fundamentado en la presidencia o Putinismo deja claro que el choque por posicionarse en esta zona totalmente estratégica, rica en gas, minería de antracita y hulla bituminosa y con puertos dominantes en los mares de Azov y Mar Negro y con intereses estratégicos para las dos superpotencias mundiales, dejan servido el caldo de cultivo para sucesos como el que ahora nos acontecen y ocupan, la invasión unilateral e ilegal internacionalmente a todos los efectos por parte de Rusia de un Estado soberano y gobierno elegido democráticamente en el año 2019 con intenciones de ser miembro UE y OTAN, algo que el invasor no podía permitirse.

Y esta es la historia resumida de este conflicto que tiene difícil solución y que sigue fielmente los acontecimientos históricos sin sesgo de quién los lea, son hechos documentados y que están al alcance de todo aquel que quiera informarse sin más, después cada uno adecuará a sus intereses y visión el por qué y el cómo, pero para mí, y esta sí es una opinión, me hace ver que nada justifica el drama humano y acción sanguinaria del invasor, porque una guerra siempre se inicia con el ejercicio de la violencia pero sin duda nunca es lo mismo cuando un territorio es ilegalmente ocupado pues el invadido se ve forzado siempre a defender su casa.

Mientras, las víctimas son los de siempre, el pueblo, la gente que no decidió empuñar ningún arma, los niños, las mujeres y los ancianos mayormente, la parte socialmente más vulnerable, esa es la que paga las consecuencias de todas las pérdidas, desarraigo y dolor, y yo me pregunto… ¿vale tanto la ambición de los hombres como para exterminar y masacrar a su prójimo, vale tanto el ego de una persona para que una sola vida perdida tenga justificación? Nunca lo vale. Y sí, es cierto que la guerra es el mayor fracaso del hombre.

@jordicarreno @JordiCris

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